Las carillas dentales son finas láminas personalizadas hechas de porcelana o resina compuesta que se adhieren a la superficie frontal de los dientes. Están diseñadas para mejorar la apariencia de los dientes, corrigiendo imperfecciones como decoloración, manchas, desgaste, malformaciones y espacios entre los dientes.
Las carillas dentales pueden proporcionar una transformación completa en una o dos visitas al dentista.
Las carillas dentales de alta calidad pueden durar muchos años con los cuidados adecuados.
Requieren una cantidad mínima de preparación dental en comparación con otras soluciones estéticas.
Existen varios tipos de carillas dentales, cada uno con sus propias características.
Algunos de los tipos más comunes incluyen:
Carillas de Porcelana
Carillas de Resina Compuesta
Carillas de Zirconio
Es más rápido: El proceso de toma de imágenes es mucho más rápido que antes. Además, el envío de estas imágenes a Invisalign se efectúa a través del software específico también en tiempo real, no como antes que había que mandar los registros físicamente al laboratorio.
Es más preciso: Es más preciso: el escaneo con iTero es mucho más exacto que con el método antiguo de toma de registros con silicona.
Es más cómodo: Es más cómodo: el paciente gana mucho en comodidad puesto que le evitamos tener durante varios minutos un molde de silicona en el interior de su boca esperando a que fragüe.
Es más limpio: Aunque las siliconas empleadas para los antiguos registros no son tóxicas, lo cierto es que solían quedarse restos entre los dientes y costaba retirarlos por completo. Gracias a este escáner, eso es ya cosa del pasado.
Es más interactivo: Mientras que antes manteníamos al paciente durante varios minutos “mudo”, con la boca llena de silicona; ahora no solo estará más a gusto, sino que también podrá ir viendo en la pantalla del escáner toda la información sobre la planificación del tratamiento y podrá dialogar y preguntarnos cualquier duda que le surja.
